Con cien cañones por banda…

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Puesto que a lo largo de estas semanas se han presentado en nuestro blog a los Grandes Navegantes de tres años y a la tribu india Las Letras formada por el grupo de cuatro años, los niños y las niñas de cinco años del Clara Campoamor hemos decidido no hacernos más de rogar y presentaros nuestro organizado grupo de ¡TEMIBLES PIRATAS! Como parte del proyecto que realizamos en colaboración con la empresa Valnalón creamos hace unas semanas una tribu unida, bien forjada y con sólidas raíces que nos permitiese conocer cada rincón del colegio. Nos convertimos entonces en fuertes piratas que buscarían tesoros ocultos en las distintas dependencias del centro. Tras dar forma a nuestros elementos representativos que son el parche y el gorro pirata y de utilizar incluso el Festival de Carnaval para crear divertidas caretas piratas como excelente motivación, construimos un enorme MAPA DEL TESORO que facilitará nuestros viajes por el cole. De dicho mapa también decidimos crear reproducciones, plastificarlas y convertirlas en manteles para la hora del aperitivo. Eso nos asegurará estar en todo momento absolutamente concentrados en nuestra búsqueda final: el tesoro del Clara.

Pues bien, a lo largo de la mañana de ayer tuvo lugar el primer viaje con calavera y tibias por bandera. El destino: la isla la biblioteca del cole. Así, sin olvidar ningún elemento de nuestro atuendo y antes de adentrarnos en dicho lugar, leímos de nuevo y de manera conjunta la adivinanza que El Pirata Feroz  dejó hace días en nuestra clase, asegurando así que el resultado de tal acertijo era UN DIENTE, elemento relacionado con los contenidos que actualmente trabajamos en el aula. Una vez dentro del aula y tras una ardua búsqueda Yara encontró nuestro primer tesoro: un sonriente diente que saquearíamos para ubicar en nuestra aula. No olvidamos que la dentadura es un tema que nos mantiene motivados no solo por la aparición del Ratoncito Pérez en nuestra clase sino porque algunos de nosotros ya hemos perdido más de una pieza, lo que nos ha preocupado y divertido a la vez.

Nuestro precioso diente nos dejó satisfechos con el trabajo realizado y además nos informó de la siguiente isla a conquistar: ¡El aula de primero de primaria!

Con el triunfo de este primer viaje digno de Jack Sparrow nos iniciamos en una ruta que nos llevará a los destinos más insospechados del cole. Sabemos que de los piratas se dice que son malvados pero… ¿no nos irá mejor siendo los piratas más amigos del mundo? Mientras valoramos esta posibilidad alzamos nuestro sable para lanzar una cálida despedida y el recuerdo de esta aventura.

 

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