Mediante el Proyecto que, a lo largo de este segundo trimestre del curso 2015-2016 se llevó a cabo en el cole Clara Campoamor, los alumnos y las alumnas de Educación Infantil pasamos a formar parte de una tribu exploradora, un grupo sólido y cooperativo que nos permitió conocer cada centrímetro de nuestro entorno más cercano: el cole. De este modo en la clase de tres años se convirtieron en Grandes Navegantes, en cinco años se pusieron su tocado de plumas para pasar a ser Indios Americanos de lo más pacíficos y en la clase de cinco se ataviaron con gorro, parche y loro para conquistar territorios como Temibles Piratas. A pesar de las evidentes diferencias entre nuestros álter ego los valores de las distintas tribus no distaron mucho los unos de los otros: amistad, colaboración, unión, trabajo en equipo… Del mismo modo todas las tribus compartirmos la misma última parada en nuestros mapas. Ya sea como continente a descubrir, un nuevo tipi o tótem o como equis en el mapa del tesoro el último lugar que exploraríamos tendría la peculiaridad de traspasar las fronteras del cole: LA BIBLIOTECA DE RIAÑO. Para ello, y esperando encontrar un merecidísimo final para este conjunto de exploraciones tan significativas, las profes se pusieron en contacto con las encargadas de este bonito lugar quienes, muy amablemente, aceptaron encantadas nuestra visita y eligieron un tema relacionado con nuestras tribus para dinamizarla.
Pues bien, en la mañana de ayer y más nerviosos que en la mayoría de las ocasiones nos colocamos nuestros elementos representativos y nos dispusimos a cruzar la totalidad del patio para emprender un camino más largo de lo habitual. Con gran responsabilidad y usando nuestros sólidos barcos o la clásica fila india llegamos a la Biblioteca. Una vez allí tuvimos la suerte de conocer a unas chicas que nos mostrarían los entresijos de unas de las tribus indias que más repercusión han tenido: los sioux. Introduciéndolo con una bonita historia india y acompañados de sonidos de tambor visualizamos imágenes de los animales preferidos de los indios americanos, bien para desplazarse o para cazar y alimentarse. Pudimos también manipular un arco indio con sus flechas y dulces atrapasueños e incluso participamos de una danza india que bien podría traer la lluvia a Villa a nuestro antojo. ¡Fue de lo más divertido! (Vídeo 1, vídeo 2, vídeo 3, vídeo 4, vídeo 5). Además casi casi todos nos portamos de maravilla, lo que dejó un buen recuerdo de estas tribus en la biblio, y los que no estuvieron todo lo calladitos que debieran prometieron mejorar en próximas actividades.
Por si todo lo vivido no hubiera sido suficiente en una mañana llena de emociones, las profes decidieron alargar un poco nuestro viaje de regreso al cole para conocer lugares cercanos, pasando al lado del parque de Riaño y oliendo los dulces de la pastelería más cercana, cosa que nos hizo la boca agua como nunca. Una vez en el Clara, y lamentando no haber podido comer el aperitivo en el parque por estar mojado, tal y como habían planeado las profes, colocamos nuestra última marca en los distintos mapas de las tribus, orgullosos de haber participado de este conjunto de excitantes visitas con las que aprendimos, nos socializamos más que nunca y disfrutamos de lo lindo.
Si bien nuestro proyecto de Tribus Exploradoras no ha llegado aún a su final y nos guardamos alguna sorpresa en la recámara para el tercer trimestre, sí que, llegados a este punto, podemos asegurar que ha sido tan exitoso como la mayoría de las actividades que los magníficos niños del Clara Campoamor llevamos a cabo. ¡Gracias a las responsables de la biblioteca por trabajar tanto para hacernos un poco más felices y a todos los que habéis hecho posible este bonito proyecto! (Fotos).